Descansito por vacaciones de Semana Santa

Disposición de la nueva línea de calabacines.

A punto de empezar las vacaciones de Semana Santa apuramos el tiempo para trasplantar una línea más de calabacines del vivero, plantar semillas de zanahorias, rabanitos y remolachas y preparar el siguiente bancal profundo que destinaremos a los pimientos. También he aprovechado para extender un metro más el bancal para los tomates. En los viveros están muy creciditos y probablemente después de Semana Santa habrá que pensar en trasplantarlos. También las aromáticas nos están pidiendo ya que las llevemos al parterre así que ya tenemos tarea para la vuelta tras las vacaciones.

Un calabacín adaptándose a su nuevo hogar.

Como va a estar todo descuidado durante unos días en estas vacaciones hemos tenido la precaución de regar con generosidad las cosas que necesitan en principio más agua, como los calabacines y las pequeñas plántulas de zanahoria, rabanito y remolacha. Esperemos que no apriete demasiado el sol, aunque hemos visto que la tierra permanece húmeda por dentro y todo debería marchar bien.

Los jóvenes guisantes saludando a la cálida primavera

Por otra parte, los guisantitos están bastante lozanos, a pesar de que apenas los riego. Como esperaba, el hecho de estar sobre el río les permite mantener las raíces bastante húmedas. No obstante he visto que hay ocho semillas que no han salido. Tendré que replantar más adelante. Cuando estén un poco más grandes los aporcaremos y les pondremos los tutores formando una especie de tipi entre las dos líneas para que se vayan enrollando sobre ellos. Con esta forma además esperamos que en el surco interior se quede en sombra y mantenga la humedad durante más tiempo. Sin embargo, justo al lado de los guisantes no hay aún ninguna señal de actividad en las berenjenas. Me temo que las semillas que hemos puesto no eran viables.

Un último vistazo general para ver el panorama que está quedando.